Pues una muesca más en la culata de Lewis Hamilton, que hace la suma nada menos que de 88, toda una proeza. Con el valor añadido de lo que supone, casi casi, medio campeonato ya en el bolsillo en esta temporada a priori tan corta. Y todo ello sin despeinarse, ya que la carrera española fue notablemente anodina en lo mollar. Se podría decir que se decidió con la mala salida de Valtteri Bottas que lo relegó tras Max Verstappen, segundo hoy, con lo que a partir de ahí poco más hubo en lo relativo al podio de España…ya ni hablamos de que el triunfo de Hamilton pudiera estar en jaque en ningún momento.
Muy bien Verstappen. Muy sólido, muy rápido, terriblemente consistente y sin el mínimo error. Es creencia asumida para la mayoría que Lewis y Max son probablemente los dos ogros de esta parrilla, un peldaño más arriba del resto, con lo cual, tener delante el Red Bull del holandés siempre tiene que ser un problema mayor para cualquiera, máxime en Montmeló, donde tampoco puedes abusar de pegarte mucho al monoplaza delantero dificultando un poco los ataques o adelantamientos… pero dicho lo cual, creemos que hoy Valtteri podía, y debería, haber hecho algo más. O al menos intentarlo.
Bottas hizo una mala carrera, sin más paliativos, no estuvo bien y punto. Puedes tener una mala salida, lógicamente, pero sigues llevando un Mercedes totalmente dominador. Y en ese aspecto, cuando tu compañero le endosa casi medio minuto al Red Bull (y conste que ya sabemos que no es lo mismo ir delante con vía libre que detrás), y tú no solo no puedes con él, sino que incluso no te acercas, ni le plantas alguna batalla, algún ataque, “algo”… Pues con eso casi esta dicho todo. Hoy el finlandés no dio el nivel, sin excusas.
En todo caso, y aunque decimos que el Gran Premio fue un tanto anodino en la lucha principal, también es de recibo decir que en la zona inmediata en la disputa de puntos, digamos que de del 5º hacia atrás, sí hubo mucha batalla e igualdad. Realmente fue más lucha de cronos y ritmo que de acciones directas, pero existió incertidumbre y muchas posibilidades distintas de resultados. Los mejores ahí fueron los Racing Point (sobresaliente hoy Lance Stroll 4º), como llevan evidenciando toda la semana, y Carlos Sainz, que como de costumbre da un plus en la cita de su casa para terminar en un buen 6º lugar.
Entrando en la carrera en sí, y como hablábamos, la salida fue crucial. Hamilton arrancaba sin problemas, pero Bottas largó lento, de manera que fue superado por Verstappen e incluso por Stroll de primeras. Los demás de arriba mantienen sus puestos hasta la zona de Pierre Gasly, que con una buena salida gana dos plazas a Lando Norris Y Charles Leclerc.
Bottas tarda cinco giros en adelantar al canadiense de Racing Point y ponerse tercero, pero claro, una cosa es Stroll y otra muy diferente es Verstappen. Ahí el asunto ya se atragantó al finés de Mercedes, que ve pasar las vueltas sin llegar a inquietar nunca a Max, anclado a unos dos segundos del Red Bull, mientras van abriendo hueco con el resto de perseguidores que encabeza la pareja de monoplazas rosas.
Sobre el giro 18 hace su primera parada Alexander Albon (6º) poniendo Duras, en lo que pensamos que tal vez fue también un tanteo de Red Bull para estudiar las posibles estrategias de gomas a emprender con Verstappen que rueda segundo. Por ello una vez comprobados y hechos sus cálculos, llaman a Max en la 22, pero para calzarlo Medias. A partir de aquí entra Sainz en la siguiente, y Hamilton una después.
Sobre el giro 29 Carlos, que se reincorporó justo detrás de Albon, lo ataca y rebasa al Red Bull, e incluso instantes después logra quedar por delante de Sergio Pérez cuando el mexicano realiza su parada y sale de boxes, aunque el de Racing Point no tardará en recuperarle la plaza. De manera que andamos prácticamente en el ecuador, con más o menos todos con sus primeras paradas completadas, y la situación está con Hamilton al frente, seguido de Verstappen a unos tres segundos, y luego Bottas a igual distancia. Tras el trío de podio, la pareja de Racing Point, Stroll y Pérez, se van a unos 42 segundos, y con ellos se sucede un pelotón de perseguidores encabezados por Sainz (6º) y Albon, que llega hasta el puesto 13º en el que las diferencias son muy escasas (casi todos ruedan a distancia de DRS).
La carrera, quitando esa zona de pequeña incertidumbre, es ciertamente plana y sosa. La calma la rompen pequeños detalles, como cuando en la 37 vemos a Leclerc perder su trasera en la chicane, trompeando y tardando en reincorporarse al trazado barcelonés, lo que lo arroja a la última posición. Poco después lo veremos abandonar a consecuencia de esa salida, y parece ser que algún problema con su Ferrari fue el detonante de dicha salida, que en principio parecía un simple error de pilotaje.
A estas alturas Hamilton se ha ido a mas de ocho segundos, mientras Bottas sigue sin poder intentar nada contra Verstappen. Y en la 40 comienzan las segundas paradas otra vez con Albon como punta de lanza. Su compañero lo secunda dos giros después, y poco a poco se van sucediendo las entradas. En este aspecto, hay que apuntar que algunos se arriesgaron a intentar una sola parada. Es el caso de Pérez, o de Sebastian Vettel.
Y respecto al alemán de Ferrari, queremos hacer un inciso y un comentario: como todo el mundo sabe, ya no es ningún secreto que la situación de Seb en la Scuderia es no solo complicada, sino casi irrespirable. Desde los últimos desencuentros, ya ni en Maranello se dignan a disimular el asunto… casi se podría decir que al piloto lo están minando desde dentro (si no por acción, tal vez por omisión…lo que de facto es lo mismo pero más abyecto si cabe). Digamos que se podría tildar con esa expresión castellana de que “le están haciendo la cama”. Bien, no es nada nuevo. Sabemos lo que es el Circo y cosas así, inocencias aparte, son tan viejas como el sol. Pero hay barreras, ciertas fronteras, que no se deberían traspasar, aunque solo sea por decencia.
Ayer, para nosotros (y hablo aparte de que Vettel nos caiga mejor o peor, o sea predilecto de alguien o lo contrario) lo que hicieron a Sebastian, y me van a perdonar la expresión, pero muchas veces hablando claro se entiende la gente… fue una “cerdada”. Porque a nuestro juicio dejaron tirado a su piloto a los leones, tirado literalmente, a los pies de los caballos. Pasaron olímpicamente de él. Lo desatendieron sin más, en pista, en plena carrera, lo dejaron “solo y ciego”, y punto. Inefable.
El asunto empieza cuando Vettel hace su primera parada (sobre la vuelta 29). Rueda peleando por los puntos, y lo montan neumáticos Blandos. Según pasan los giros y los de arriba realizan sus segundas paradas Sebastian se ha colocado 5º, y ante la omisión de directrices, el piloto empieza a preguntar a su equipo si tal vez es de considerar una estrategia de una sola parada… no obtiene respuesta. Varias veces Vettel incide en que le digan, en que le guíen. Y es muy lógico e importante esto, ya que hay que entender que va con goma Blanda, por lo tanto es crucial saber cuanto antes el camino a seguir porque de no parar más el alemán tendría que gestionar la friolera de 37 vueltas vueltas con los blandos (casi 40 de 66 con blandos). Pues bien, siguió obteniendo silencio por única respuesta. Lo que apuntábamos antes, prácticamente como si su muro pasara de él. Finalmente, según pasaron las vueltas le llaman por radio y le dicen que tal vez podría intentar llegar con esas gomas (a lo que ya Seb respondió con cierta ironía).
En resumen. Vettel corrió solo, tal cual. Y tuvo que gestionar su carrera, su estrategia, su ritmo, su desgaste, etcétera, sin la más mínima ayuda de su muro. Eso en la F1 actual es algo inusitado, y casi una proeza. Así lo vimos nosotros, y así se lo exponemos aquí (por más que luego saquen alguna excusa y pongan paños calientes a la anécdota). Inefable. Más allá de las desavenencias intestinas, de los desencuentros, y de los mil líos internos que existan… señores de Ferrari, en el momento en que tienes en pista, en carrera, en competencia, a un piloto jugándose la vida sobre uno de tus bólidos rojos… lo menos, lo mínimo, es mantener un ápice de dignidad para con él. Y en este sentido lo visto fue una infamia. Ayer Vettel fue grande, y Ferrari muy pequeña.
A raíz de todo esto, afrontamos la parte final sin ninguna emoción por arriba, pero sí desde Pérez para atrás. El Mexicano iba 4º pero con una sanción de 5 segundos pendiente, por lo que quedaría fijo detrás de Stroll y cerca de perder plaza también con Sainz, que hacia el final había adelantado también a Vettel, quien lógicamente fue perdiendo plazas en los últimos giros con unas gomas blandas desintegradas con casi 40 giros, pero que supo mantener para acabar en una estupenda 7ª posición, visto lo visto. Gran carrera del alemán, que por momentos va dando incluso cierta pena por su situación interna, y que bajó del coche con una mirada en la se podía leer un pensamiento “cualquier día de estos, entro a cambiar ruedas y me encuentro el box sin mecánicos ni ingenieros que me atiendan”.
Y estos fueron los resultados finales, aun provisionales, de este Gran Premio de España de 2020:
