Bajo bandera de nacionalidad austríaca, aunque con base operativa en Milton Keynes (Gran Bretaña), la escudería Infiniti Red Bull Racing nace oficialmente a la competición un 15 de Noviembre de 2004, cuando la marca de bebidas propiedad de Dietrich Mateschitz concreta la adquisición, por un precio estimado que rondaría los 110 millones de dólares, del equipo de Fórmula 1 Jaguar Racing, una vez estos anunciaban su retirada de la competición tras esa temporada.
Para hacer un poco de historia y reseñar los orígenes del equipo, nos hemos de remontar al año 1997, cuando Jackie Stewart crea su propia escuadra de F1, Stewart Grand Prix, cuya andadura no fue muy dilatada, ya que pocos años después, tras acabar la temporada de 1999, el equipo es comprado por la multinacional Ford Motor Company, para correr bajo el nombre de Jaguar Racing.
No obstante, los inicios no fueron nada desalentadores para Stewart, con incluso una victoria en su último año. A partir de ahí, Jaguar pretende dar un salto de calidad en todos los niveles, con la contratación de figuras como Niki Lauda y Bobby Rahal para los ámbitos directivos y técnicos, así como el intento que no llegó a fraguar de fichar a Adrian Newey… A pesar de ello, y tras unos años intentándolo a base de inversiones notables, los resultados esperados no llegan, no alcanzando los logros a los que Stewart les había encaminado.
Tras esto, finalizada la temporada 2004, Ford anuncia su retirada y entra en escena Red Bull. La escudería, que queda a las órdenes de Christian Horner como Director de Equipo, mantiene los motores Cosworth (de Ford), y confía los volantes en manos de un piloto enormemente experimentado, David Coulthard, y de una joven promesa, Christian Klien, que acometen el debut en 2005 con bastante buen desempeño y resultados, puntuando con ambos monoplazas en las dos primeras citas del año, y finalizando ese Mundial séptimos entre los constructores, con 34puntos acumulados. Inicio notable y meritorio, tras el fracaso deportivo de Jaguar.
Tras el intento de contratar al ex piloto Gerhard Berger (también austríaco), en esos momentos director de BMW Motorsport, para que se hiciera cargo de las riendas del equipo, Mateschitz anuncia el fichaje del diseñador del momento, Adrian Newey, como cabeza del proyecto para la siguiente temporada. Entre los cambios, es significativo el del propulsor, que será suministrado por Ferrari. Así, comienza el Mundial 2006 y pronto se empiezan a ver algunos resultados, como el primer podio del equipo, conseguido en el Gran Premio de Mónaco por David Coulthard, que cruza la meta tercero. Finalizan de nuevo séptimos en la categoría de constructores.
La siguiente temporada, 2007, la escudería incorpora nuevos cambios. Monta motores Renault, y contrata como compañero de Coulthard al australiano Mark Webber (que ya estuvo en Jaguar años antes). El inicio es complicado, pero en el Gran Premio de Europa, Webber aprovecha una carrera un poco caótica para alzarse con otro podio. También en Japón estuvo a punto de hacerlo, cuando es echado de la pista por un rival (precisamente Sebastian Vettel) cuando su segunda posición era casi definitiva. Aún así, el año es fructífero con un destacado quinto puesto final en la tabla de equipos con 24 puntos.
En 2008 siguen la progresión, manteniendo la mayoría del staff deportivo, y su primera mitad de temporada es brillante, con otro podio de David Coulthard en Canadá, aunque luego pierden algo de fuelle al final. Terminan séptimos esta vez, a pesar de acumular más puntos totales que el año anterior, con una suma de 29.
El año 2009 es el de la retirada de Coulthard, a quien sustituyen con un jovencísimo Vettel, quien venía de sorprender y brillar por méritos propios en la temporada anterior con Toro Rosso, donde había incluso logrado una Pole Position y una victoria. El alemán pronto demuestra su talento, dando a Red Bull su primera Pole seguida del triunfo en el GP de China, imponiéndose a equipos sobre el papel mucho más poderosos. La temporada es sobresaliente, demostrando ser la escuadra que mejor sabe adaptarse e interpretar las evoluciones del reglamento técnico, y finalizan subcampeones de equipos, con Vettel segundo y Webber cuarto en el Mundial de pilotos. Consiguen seis victorias y es el detonante del brutal salto de calidad que catapultaría a Red Bull Racing a la élite de la F1.
En 2010 ya parten como favoritos en la mayoría de las quinielas, y aunque efectivamente el coche se muestra rapidísimo, incluso muy superior a menudo, también adolece de cierta fragilidad, y la fragilidad será su caballo de batalla todo el año. A pesar de conseguir nada menos que 15 Poles en los 19 Grandes Premios, con frecuencia les cuesta rematar las carreras, pero finalmente, en Brasil, última cita del año, los pilotos consuman un doblete que les da el Campeonato de Constructores, y el de Pilotos para Vettel, con Webber quedando tercero, y con un total de 9 victorias y 498 puntos.
El año siguiente, en 2011, Red Bull consolida su autoridad, construyendo un RB7 tan superior al resto de monoplazas de la parrilla que lo hacen imbatible, casi insultante. El campeonato es un paseo, máxime cuando han conseguido limar su único punto débil, la fiabilidad. 18 Poles de 19 carreras y 12 victorias son un ejemplo de lo apabullante de los datos. Consiguen el récord de 650 puntos, revalidando ambos Títulos, y con Webber tercero de nuevo.
Llegados a 2012, todas las miradas estaban otra vez puestas en ellos. Vuelven a ser el rival a batir, pero las nuevas restricciones en cuanto al soplado de los difusores con los gases de escape hacen pensar que pueden ser alcanzados por los demás. Y efectivamente, el inicio del campeonato transcurre con altibajos para ellos. Siguen muy fuertes a una vuelta, pero sufren más en carrera… Aún así nunca pierden del todo comba en la tabla clasificatoria, y aprovechando la poca fiabilidad y fallos de McLaren (probablemente el bólido más rápido de ese año) y los dubitativos pasos de Ferrari, que no termina de dar con la tecla del todo, siguen en la brecha con buenas posibilidades. Así hasta llegar al último tercio, donde la escudería austríaca afina su monoplaza y concatena una secuencia de carreras excelentes, sobre todo por parte de Vettel, que lo llevan a remontar y conseguir el Título en un emocionante final. Webber termina sexto y Red Bull logra el Campeonato con 460 puntos, acumulando 8 Poles y 7 victorias en 20 carreras.
En 2013 el RB9 vuelve a ser rápido desde el inicio, pero los neumáticos de Pirelli no aguantan bien toda la carga aerodinámica que el coche genera. Aunque Vettel comienza la temporada en Australia en el podio y vence con mucha polémica en Malasia, tras desobedecer órdenes de equipo que le pedían mantener posiciones cuando Webber iba primero, el equipo no dominaba como lo había hecho en otras ocasiones. Pero tras el parón veraniego, con el cambio de especificación de los neumáticos y el continuo trabajo de los de Milton Keynes, el binomio Vettel-Red Bull se mostró absolutamente arrollador siendo inalcanzable para todos sus rivales. El alemán ganó todas las carreras restantes, nueve consecutivas, para batir el récord, logrando por supuesto su cuarto Título Mundial, así como el cuarto Título para Red Bull de Constructores, con 13 victorias (todas ellas de Vettel) y 11 poles (9 de Vettel) en 19 carreras. Durante la temporada 2013 Mark Webber anunciaba su decisión de dejar la F1 para pasarse al Campeonato del Mundo de Resistencia con Porsche. En Red Bull deciden ascender al piloto de Toro Rosso, Daniel Ricciardo, para que sea a partir de 2014 el compañero de Sebastian Vettel. Después de una desastrosa pretemporada con la unidad de potencia de Renault, logran recuperarse para terminar en segundo lugar en el campeonato de constructores, como único otro equipo en ganar una carrera. La estrella en ascenso es Ricciardo quien consigue tres victorias, dominando al cuatros veces campeón Vettel, que al final de año pone rumbo a la Scuderia Ferrari. Así bien, 2014 es el año donde se acaba la hegemonía que Red Bull venía viviendo desde 2010. Para 2015 cuentan con Ricciardo y Daniil Kvyat como pilotos del equipo, después de ascender a este último desde la escudería hermana Toro Rosso.