Una gran tarde de domingo desde la Tribuna F de Montmeló
hace 12 años
Todo buen aficionado que ama a la Fórmula 1 siempre intenta poder asistir a un Gran Premio. El gusto por el sonido, la velocidad, y el olor a goma, son una de las señas de identidad de las muchas personas que vamos poblando los circuitos de todo el mundo.
Por suerte en España vivimos una época en la que el automovilismo tiene un auge tremendo. Montmeló lleva siendo referencia en el Gran Circo desde hace muchos años. Una de las frases más escuchadas por parte de Bernie Ecclestone, el capo de este deporte, es la siguiente, "cuando alguien me pide consejo para organizar un Gran Premio, siempre suelo responder que vaya a Barcelona y vea lo que supone poner en marcha un evento de este tipo".
Año tras año, Montmeló acoge el Gran Premio de España. Una carrera en la que siempre hay cosas que ver, ya que muchas veces ha coincidido con el inicio del periodo europeo. En este 2013, la tradición no ha cambiado y hemos podido contemplar un gran espectáculo. Desde la Tribuna F -el lugar donde llevo apalancado ya bastantes años- se tiene un marco incomparable de lo que es la Fórmula 1. Esta grada, situada estratégicamente a final de la recta principal, permite al espectador de disfrutar de gran parte del circuito. Además cuenta con varias pantallas gigantes que le hace ser un lugar perfecto para seguir la carrera sin perderse un detalle.
Como viene siendo habitual en los últimos años, en esta zona se congrega todo tipo de espectadores. Los hay de todas las nacionalidades, pero en este pasado fin de semana han destacado por encima de todo unos finlandeses que han gozado de lo lindo con las actuaciones de Kimi Räikkönen. Cada vez que pasaba el finlandés volador, el bullicio de su parroquia era más que evidente. Kimi gusta mucho, y su forma de ser le hace ser aún más querido.
Alonso y Räikkönen hacen vibrar a la Tribuna
Aunque los aficionados de Fernando Alonso estaban en clara minoría, fueron unos auténticos jabatos a la hora de hacerse notar. La calificación les dejó un poco fríos, pero en carrera montaron una fiesta continua en cuanto vieron al asturiano poner pies en polvorosa respecto a la competencia. A pesar de que el sol si calentó de lo lindo en la jornada del domingo, el ímpetu de todos fue enorme. Una buena cerveza bien fresquita fue el compañero ideal de todos nosotros.
Al estar situados a final de recta, se tiene una posición privilegiada para poder contemplar adelantamientos y batallas rueda a rueda. No sólo ese punto produce satisfacción, ya que la bajada a la Moreneta se ve perfectamente. Dos puntos claros de disfrute que con estos Pirelli tuvieron aún más mambo.
La grada vibró cuando Fernando Alonso se puso en primera posición. El estruendo fue enorme, al igual que cuando Kimi Räikkönen metió ese hachazo a un Sebastian Vettel que se vio impotente ante el poderío del Lotus. Rueda a rueda y el posterior 'ohhh' acompañado de muchos aplausos cuando el finlandés hizo que el alemán mordiese el polvo. Fernando estaba ganando con autoridad, y el nuevo enemigo público de la afición española se iba para atrás irremediablemente. Plena satisfacción en una Tribuna que terminó la carrera con una sonrisa de oreja a oreja. Se vieron buenos adelantamientos, y los pilotos favoritos de la gente cuajaron grandes actuaciones. Fórmula 1, sol y una buena cerveza. Difícil de mejorar.
18 Comentarios
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Mikel que bueno que usted pueda asistir a una GP, yo todavía no he podido vivirlo, mi gran sueño es ir a Monza, debo darme prisa porque cómo van las cosas no demoran en sacarlo del calendario por alguna carrera nocturna en algún país asiático con bastante dinero.