Si hace poco más de un mes, el nombre de Honda se asoció fuertemente a una posible vuelta, ahora le toca el turno al otro gigante japonés de la automoción. Primeros rumores en los que Toyota, a través de Lexus, puede volver a la Fórmula 1.
Era evidente que tarde o temprano ambas compañías iban a sopesar volver a entrar en el Gran Circo. Si se marcharon fue única y exclusivamente porque una conjunción de nefastos acontecimientos económicos había dañado su línea de flotación. En Japón tienen muy claro el modo a proceder cuando las ventas de sus coches caen. Primero se cierra el grifo de los departamentos de competición, antes que despedir a miles y miles de empleados, cosa que está muy de moda por Europa.
Sin embargo, que la noticia haya salido el 1 de abril, no hace más que aumentar las dudas de todo esto. El ‘April fool’, lo que sería el día de los santos inocentes en el mundo anglosajón, es un factor que invalida casi cualquier análisis sobre el tema, pero cómo estamos en este impás entre carrera y carrera, no viene mal poner en marcha el modo soñador.
El honor está en juego
Volver a la Fórmula 1 siempre estará en la mente de los directivos de Toyota, ya que sienten que su reciente etapa fue un fracaso. Esa sensación de no haber conseguido los objetivos previstos, no gusta nada en el mundo nipón, y sienten que tienen la obligación de restituir la imagen dañada. Los millones y millones de euros gastados en el programa de F1 para conseguir un puñado de podios, fue un ataque a su honor en toda regla. Sólo hay que volver a ver la comparecencia frente a los medios de Akio Toyoda el día en el que Toyota anunció su retirada. Lágrimas pidiendo perdón al pueblo japonés.
Visto el enorme desembolso que se tiene que hacer para tener un equipo de F1 competitivo, es casi inviable que vuelvan como constructor. Otra cosa es que lo hagan como motorista, siguiendo los pasos que actualmente dicta Renault, o cómo los que muy probablemente sigan en Honda. Si la gran competidora de Toyota vuelve, se sentirán casi obligados a hacerlo.
Teniendo en cuenta la cantidad de dinero que Toyota destina para su equipo del Mundial de Resistencia, es evidente que su reentrada sería bajo unos términos económicos mucho más sostenibles. Aunque se tengan previstas numerosas modificaciones reglamentarias para 2014, el WEC sigue estando años luz por delante de la Fórmula 1 en cuanto a innovación tecnológica, y este aspecto es la clave de todo el asunto para Toyota. Si la F1 de verdad coge una deriva de innovación, pondrán toda la carne en el asador. Si el Gran Circo sigue con una mano atada a la espalda, habrá una legítima duda de si de verdad las marcas japonesas tendrán verdadero interés o no.
Creo que algún día volverán. Como bien dices, Mikel, es un asunto pendiente ya que se marcharon de la F1 sin ganar algo importante y esa no es su mentalidad. Además, cuentan con la sede de Toyota Motorsport GmbH en Colonia, por lo que de volver, no les resultaría tan complicado como a otros equipos que tienen que empezar desde cero. Es un punto muy importante para ellos.