Stefano Domenicali ha admitido hoy que el equipo Ferrari siente una gran responsabilidad ante esta temporada después de un complicado 2009. Ferrari sólo ganó una carrera el año pasado y sólo ha conseguido un título mundial desde los cinco consecutivos de Michael Schumacher del 2000 al 2004.
Pero Ferrari parece más determinada que nunca a resurgir y volver a lo más alto con el Ferrari 281 que se presentará el 28 de enero en Maranello. Para lograrlo, el equipo ha trabajado en mejorar la fiabilidad de su coche conscientes de que en los últimos años han comenzado los campeonatos con bastantes problemas que comprometían el resto de la temporada, y por supuesto, en el rendimiento aerodinámico. Ante una temporada muy larga, de 19 carreras, también tienen como objetivo ser capaces de desarrollar continuamente su monoplaza durante el año.
No hay duda de que la llegada de Fernando Alonso ha inyectado nuevos aires y confianza al equipo. El retorno de Michael Schumacher, ex-talismán de Ferrari, permitirá reanudar la lucha entre el alemán y el asturiano, su mayor enemigo en la lucha por el status de mejor piloto en los últimos años antes de su retirada. Domenicali no tiene ninguna duda acerca de lo fuerte que será Schumacher, pero cree que Alonso tiene todo lo necesario para derrotarlo.
Domenicali, sin embargo, sabe que «con palabras podemos decir cualquier cosa pero son los hechos los que tienen que hablar. Ahora nos toca a nosotros darle el coche adecuado».
Foto 1: Grandprix/ Foto 2: Daylife
