Hamilton-Button, tercer asalto

Jenson Button demostró un gran coraje al meterse en McLaren como compañero de Lewis Hamilton en 2010 después de ser campeón en 2009, para demostrar a todos que su título no sólo se debió a tener un gran coche como el Brawn GP. Hasta los más escépticos se han dado cuenta ya de que Button está en la liga de los mejores. En sus dos temporadas en McLaren ha conseguido más puntos que Hamilton, ¿quién habría apostado por ello cuando llegó al equipo?

En 2011, en su segunda temporada en McLaren, Jenson se sentía más cómodo en el equipo, había podido aportar más en el desarrollo del coche y su confianza era alta. Ésto, junto con el estreno de los neumáticos Pirelli, que exigían un profundo entendimiento de las estrategias, han hecho que sólo fuera batido en el campeonato por el intocable Vettel. Ni Webber con un Red Bull superior, ni Alonso con el Ferrari, ni Hamilton con su mismo coche han podido con él.

Uno de los puntos fuertes de Button siempre ha sido su habilidad para trabajar con el equipo y liderarlo. Teniendo al lado a Hamilton, piloto de McLaren desde que pilotaba karts, era diferente pero ha demostrado otra vez que puede hacerlo. En 2010 llegó tarde a McLaren después de haber sido campeón y pudo trabajar muy poco en el MP4-25 pero en la segunda parte de aquella temporada fue capaz de empujar el desarrollo del coche para adaptarlo a su gusto, y en 2011 ha tenido el coche que ha querido. Se ha ganado al equipo, que siempre le ha escuchado.

Siempre ha sabido hacer funcionar una estrategia. Si el objetivo es hacer tres paradas, se asegura de que los neumáticos le duren el número objetivo de vueltas manteniendo un buen ritmo durante toda la carrera sin cometer errores y sin ponerse nervioso si las cosas no salen bien. El mejor ejemplo fue en Canadá 2011, GP en el que rodaba último en la vuelta 40 pero supo controlar sus emociones para lograr una impresionante victoria. El GP de Japón en Suzuka también fue importante para Jenson porque logró una victoria basada únicamente en su rendimiento sobre suelo seco, sin lluvia, aplicando su pilotaje y experiencia para ganar, logrando además la vuelta rápida.

Sobre las cualidades de Hamilton al volante no vamos a extendernos porque son de sobra conocidas, pero en 2011 ha dejado que sus problemas personales le afectaran en la pista. Fueron interesantes sus palabras el año pasado en torno al asunto: «Jenson ha hecho un gran trabajo para tener las cosas en el lugar correcto. Tiene a su padre ahí en cada carrera, a su mánager, sus amigos, tiene a su novia todo el tiempo. Tiene una gran burbuja en torno a él, con la que está muy contento. Con eso puede salir y rendir sin preocupaciones en su mente. Yo tenía eso pero perdí la burbuja y ahora no la tengo. Estoy trabajando para tenerla en el futuro. La parte consciente y la subconsciente de la mente son muy importantes en este deporte«.

Esta temporada Hamilton está decidido a aprender de los errores pasados y centrarse en lo más importante para él, la competición. Para ello tiene que resolver otra cuestión, y es decidir sobre su futuro. Al final del 2012 acaba su contrato con McLaren y Lewis quiere sentarse ya pronto con el equipo para zanjar el asunto y renovar con ellos salvo sorpresa mayúscula por mucho que tuviera el año pasado una reunión secreta con los responsables de Red Bull.

Martin Whitmarsh le ha dado a Hamilton un descanso invernal más largo de lo habitual para que deje atrás su difícil temporada y llegue más fuerte este año. La lucha interna en McLaren promete por tanto ser apasionante con un Button más adaptado todavía al equipo y un Hamilton dispuesto a volver a ser el pilotazo de siempre.