Mark Webber

Fanático de los deportes del motor, comenzó pilotando motocicletas pero tras comenzar a pilotar karts a los 14 años y lograr varios títulos nacionales, este australiano decidió quedarse en el deporte de las cuatro ruedas.

Pasó a la Fórmula Ford australiana en 1994 para terminar 14º con un presupuesto muy ajustado, pero al año siguiente ya llegaron sus primeras victorias, incluyendo la de la carrera soporte del Gran Premio de Australia. Subir al podio en el Fórmula Ford Festival de 1995 le valió para lograr un volante de Van Diemen para la Fórmula Ford británica de 1996, logrando cuatro victorias para ser subcampeón, volviendo a Brands Hatch para el Festival del 96, consiguiendo en esa ocasión la victoria.

Mark Webber tras ganar el Formula Ford Festival en 1996

En 1997 saltaba a la F3, logrando la cuarta posición del campeonato con el equipo de su compatriota Alan Docking, acabando también tercero el Marlboro Masters en Zandvoort y cuarto en el Gran Premio de Macao, atrayendo la atención de Mercedes AMG, que le fichó para el campeonato FIA GT de 1998. Como compañero del entonces campeón mundial Bernd Schneider, Webber logró cinco victorias, estando a punto de llevarse el título.

Para 1999 el campeonato FIA GT se canceló y el australiano fue parte del asalto de AMG a las 24 horas de Le Mans. Sobrevivió ileso a dos famosos vuelos de aquellos Mercedes a alta velocidad, accidentes que obligaron a la marca alemana a abandonar la carrera y la temporada. Tras bajarse del sport-prototipo por última vez cuando éste estaba boca abajo, decidió centrarse en los monoplazas.

Mark Webber vuela con su Mercedes en Le Mans 1999

Paul Stoddart, quien estaba creando un nuevo equipo de F3000 confió en Webber en el año 2000 tras impresionarle en un test. Una victoria, tres podios y la tercera posición del campeonato (la mejor hasta entonces de un debutante) demostraron que no había perdido tacto con los monoplazas. El jefe de Arrows, Tom Walkinshaw le dio la oportunidad de realizar su primer test de F1, pero después Flavio Briatore y Benetton le llamaron para ser su piloto de pruebas y reserva en 2001, continuando en la F3000 con Super Nova como parte del trato. Centrado ya en la F1 terminó subcampeón, y se aseguró el volante de Minardi para el 2002, equipo dirigido por Stoddart.

Mark Webber con el Minardi en 2002

Debutar en F1 logrando la quinta posición delante de su público en el GP de Australia era mucho más de lo que nadie pudiera esperar. Pero aquel resultado no fue casualidad y continuó superando expectativas con el modesto Minardi.

En 2003 pasó a Jaguar, mostrando un gran talento en calificación logrando dos veces la tercera posición de la parrilla aunque el coche no era demasiado rápido en carrera. Sin embargo logró 17 de los 18 puntos de Jaguar esa temporada mientras todos se preguntaban lo que sería capaz de hacer con un buen coche. En 2004, con problemas financieros para el equipo todo fue a peor y tras lograr sólo siete puntos anunciaba su paso a Williams en 2005.

Mark Webber en el GP de Italia en 2004 con el Jaguar

Sobre el papel era un buen cambio, pero Williams estaba entrando en un callejón sin salida. Mark continuó demostrando sus habilidades en calificación, pero los 36 puntos y la décima plaza en el campeonato no cumplieron sus expectativas. Tampoco fue bien su segunda temporada con el equipo, con un Williams poco fiable (11 abandonos) y sólo siete puntos aunque con su posición en la primera fila de la parrilla en Mónaco seguía demostrando sus manos.

Mark Webber en Imola 2005 con el Williams

En 2007 Webber pasaba a Red Bull, con un RB3 que tenía potencial, aunque poca fiabilidad, así que las habituales posiciones de parrilla entre los 10 primeros ráramente se traducían en puntos. La excepción más notable fue en Nurburgring, donde subió al podio gracias a una merecida tercera posición. El ritmo de carrera fue su mayor problema en 2008 con una cuarta posición en Mónaco como mejor resultado aunque su velocidad en calificación seguía siendo incuestionable, logrando en Silverstone por primera vez para Red Bull una posición en la primera fila de la parrilla de salida.

En 2009 los preparativos de la temporada se vieron obstaculizados por una fractura en una pierna en un accidente de bicicleta, y su nuevo compañero, Sebastian Vettel, acaparó los titulares al lograr la primera victoria de Red Bull. Pero Webber fue tomando impulso y en Alemania lograba su primera victoria, en su 130º GP. No pudo luchar por el título, aunque volvió a ganar en Brasil y acabó cuarto el campeonato.

Mark Webber durante el GP de Malasia 2011 con el Red Bull

En 2010, con un rapidísimo RB6, su comienzo de temporada no fue bueno, pero entrado en materia las victorias en España, Mónaco, Gran Bretaña y Hungría lo compensaron sobradamente. Tras momentos de gran tensión con su compañero Vettel, como el accidente entre ambos en Turquía, llegó a la última cita del campeonato con opciones aunque una mala estrategia le hizo terminar la temporada en la tercera posición del campeonato.

El RB7 del 2011 fue claramente dominante en manos de Vettel, capaz de sacar un mayor rendimiento de su difusor soplado, y Webber tuvo que permanecer en su sombra, logrando sólo tres pole-positions y una sola victoria.

En 2012, otra vez en Red Bull, el australiano volvía al ataque decidido a olvidar su decepcionante temporada anterior, mucho más en forma y motivado. Sus victorias en Mónaco y Silverstone le convirtieron mediada la temporada en el líder del equipo en el asalto al Título Mundial, segundo en la clasificación tras Fernando Alonso, pero la segunda parte del campeonato no fue como a él le hubiera gustado y terminó sexto.

En 2013 Mark Webber continua en Red Bull, intentando dar fin a la exitosa racha de su compañero, Sebastian Vettel. Pero la primera mitad del Campeonato es algo irregular para el australiano, englobando momentos de luces, con otros de sombras, pues aunque su media de resultado final en carrera ronda el 4º puesto, lo que no está nada mal, no acaba de despuntar con victorias (mientras que su compañero alemán sí lo hace con asiduidad), y aglutina un abandono y un par de séptimos puestos, combinados con tres podios (dos segundos en Malasia e Inglaterra, y un tercero en Montecarlo).

Despedida de M. Webber. GP Brasil 2013

Llegados al ecuador, Webber anuncia una de las noticias de la temporada, cuando el 27 de Junio da a conocer su decisión de poner fin a su carrera en la Fórmula 1 a finales de año (algo que ya era un notorio rumor en el mundillo) para acometer una nueva etapa en su carrera deportiva de la mano de Porsche en el Campeonato Mundial de Resistencia.

Notable pérdida para la F1, la marcha de este gran piloto, que deja vacante uno de los asientos más codiciados en el mejor equipo de la parrilla, Red Bull (eso sí, bajo el férreo monopolio de Vettel), y que tras escasa deliberación recayó en las manos de otro piloto “de la casa”, el compatriota de Mark, Daniel Ricciardo, que estaba en las filas de Toro Rosso.

Tras el anuncio, y como si con ello se hubiera quitado un lastre de presión de encima, Webber protagoniza una segunda parte de temporada excelsa, regalándonos carreras en las que destila enormes muestras de talento y maestría, y a pesar de que la fiabilidad y terceros problemas le penalizan duro en tres citas, en todas las demás no se apea del podio, siendo casi el único que planta cara al insaciable Sebastian, acumulando dos terceros en Monza y Estados Unidos, y tres segundos en Suzuka, Abu Dabi y finalmente en Interlagos, arrebatándole incluso dos Pole Positions a su compañero.

Pone brillantemente punto final a su periplo en la categoría con un meritorio tercer puesto final en el Mundial de Pilotos, sumando el montante de 199 puntos, y dejando un expediente tras de sí al alcance de pocos corredores en este deporte, pese a no alcanzar un Título Mundial. Disfrutamos con él… ¡Suerte Mark!