Max Verstappen ha volado en los entrenamientos libres del GP de Bélgica, donde ha ejercido una superioridad insultante sobre sus rivales directos e indirectos (casi un segundo sobre Checo), pese a cambiar motor (al igual que Tsunoda), lo cual le relagará diez puestos en parrilla el domingo.
Esto le permite afrontar con una nueva unidad de potencia (la cuarta del año) el próximo tramo de temporada. No es la primera vez que el holandés elige Spa para ello, dado las facilidades para adelantar con las que contará en su segunda carrera de ‘casa’. Mientras, los Ferrari sufren con el rebote y los Aston Martin adolecen de falta de potencia.
No se espera lluvia para esta tarde pero sí para la qualy de mañana, aunque la única emoción posible la pondrá la penalización a Verstappen, que va sobrado en las Ardenas.
