Franco Colapinto: Del karting a la gran ilusión
hace 1 año
Conocé la historia del argentino que sueña con llegar a la Fórmula 1.
Franco Colapinto "debutó" el martes pasado en la máxima categoría a bordo de un FW45 de la escudería Williams en el circuito de Abu Dhabi en el marco del "Rookie Test" de la Fórmula 1, junto a otros jovenes pilotos. Con esa performance, Colapinto realizó los 300 kilómetros que lo habilitan a sacar la superlicencia que le permitiría ser promovido a competir por un asiento en la categoría reina del automovilismo.
"Ver que tantos argentinos se pusieron contentos por este momento histórico, es algo muy lindo. Lo disfruté muchísimo porque fue todo muy positivo y cumplimos el objetivo", dijo el piloto de Fórmula 2.
Pero, ¿quién es Franco Colapinto?
Nació el 27 de mayo de 2003 en Argentina, heredó su pasión por el automovilismo a temprana edad gracias a la influencia de su padre, Aníbal, un entusiasta corredor zonal de autos y motos. Su primer contacto con el volante fue con un triciclo de juguete a los 3 años.
A los 10 años Franco se adentró en el mundo del karting. En 2018 ganó los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires en karting.
En 2018 se unió a la escudería Drivex en la Fórmula 4 española. Su destacada temporada en 2019 lo vio ganar el campeonato con 325 puntos y 11 victorias en 21 carreras. En octubre de 2020, firmó con MP Motorsport y, inicialmente, se sumó a la Eurocopa de Fórmula Renault. Sin embargo, su rápido ascenso lo llevó directamente a la Fórmula 3 en 2021. Así, en 2022 debutó en la F3 y finalizó en el puesto 9°.
En 2023 Williams nombró al argentino como nuevo miembro de su Academia de Pilotos. También, en octubre de este año se confirmó que va a estar en la Fórmula 2 a partir del 2024 con el equipo MP Motorsport.
Con una historia llena de superación, Franco sueña con poder llegar a la Fórmula 1, pero el camino para ningún piloto es sencillo y tal vez, menos para uno sudamericano, en el que las distancias de Europa no le favorecen, los costes son altísimos, el idioma no es el mismo y los sponsors no lo conocen. Pero un soñador no se rinde fácilmente...
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