El nuevo y contundente “primero y segundo” de Red Bull, teniendo además en cuenta que uno de sus monoplazas salía bastante retrasado, pone de manifiesto algunas cosas, que aunque ya sean consabidas por la mayoría, no dejan de ser interesantes de recordar.
Una de ellas es que, efectivamente, el equipo austríaco rueda en otra liga. Sus tiempos y ritmo, cuando lo precisan, es inalcanzable para el resto de rivales, lo que evidencia que en ese sentido, la temporada la tenemos prácticamente “vista para sentencia” a pesar de ser esta sólo la segunda cita del año.
Y el otro aspecto que nos gustaría resaltar es que, tras el despliegue ofrecido hoy por Sergio Pérez, es bastante nítido que el bravo mexicano corre, la mayoría de las veces, un tanto supeditado a ese rol de “segundo espada” de Red Bull. No decimos con esto que Checo sea mejor que Max, ni lo contrario. Sólo ponemos de manifiesto que, cuando como hoy, les dejan con libertad para competir abiertamente, Pérez puede no sólo mantener la cara a Max, sino perfectamente ganarlo de ley.
Evidentemente, ya les adelanto que esto no será lo habitual, y que por norma general Verstappen va a tener las de ganar en este supuesto juego de roles, no vamos a engañarnos a estas alturas… pero ahí queda la muestra patente de lo dicho. Sergio es un piloto de categoría tope, que podría realmente disputar el mundial… aunque no vayamos a tener oportunidad de presenciarlo, salvo circunstancias muy anómalas que acontecieran.
Y tras la victoria de Pérez y el segundo puesto de Verstappen, cruzó tercero la meta de nuevo Fernando Alonso a bordo de su flamante Aston Martin, que se ha convertido, y ya creemos que esto es algo sólido, en el segundo equipo del campeonato tras los Red Bull. El segundo equipo y con claridad, a nuestro juicio, pues tanto por prestaciones como por comportamiento en distintos circuitos y condiciones, se lo ve en un peldaño ciertamente superior a Ferrari o Mercedes. Si la fiabilidad los respetan, no creemos que tengan problemas los de verde para afianzarse en ese estatus en el campeonato.
Pero aunque Alonso subió al podio y recogió su trofeo, a los pocos minutos lo perdía cuando se confirmó una investigación que tenía pendiente. El caso es que en carrera fue penalizado con cinco segundos que cumplió en su primera parada a boxes, pero fallaron al hacerlo ya que rozaron el coche con el gato elevador antes de que pasaran esos cinco segundos donde no se puede tocar el coche en lo más mínimo. Fue un error de milímetros, probablemente propiciado por querer afinar la situación al máximo… pero por absurdo que fuere, el reglamento es claro al respecto, y la jugada les costó el podio ya que por ello se le aplicaron otros diez segundos de penalización post-carrera, lo que hizo caer a Fernando a la cuarta plaza, en beneficio de George Russell que recogerá ese podio… y por centésimas no llegó a perder el español la posición también con el otro Mercedes de Lewis Hamilton.
A este respecto, no objetamos nada en lo referente a la penalización si tal irregularidad sucedió como parece que fue. Pero sí nos pronunciaremos en otro sentido. Y es que, desde el hecho, tuvieron 31 vueltas, más de media carrera, para dilucidar y referir el tema, en vez de dejarlo para hacerlo minutos después del banderazo. Y esto es importante, pues de haberlo decidido antes (y este deporte las cosas hay que ultimarlas lo más raudos posible, pues los tiempos van a la milésima a veces), de haberlo sabido antes, repetimos, Alonso probablemente no habría tenido ningún problema en apretar más y enjugar esos segundos extra… de hecho el propio Fernando así lo ha manifestado declarando que de saberlo tenía guardado bastante al final y podía haber hecho fácil un hueco de doce segundos.
Entrando ya en la carrera, Alonso ganó la partida a Checo en la arrancada poniéndose en cabeza, mientras que Sainz perdía a su vez su cuarta contra el otro Aston Martin de Lance Stroll no en la misma salida pero sí en esa primera vuelta. Más atrás Charles Leclerc era el mejor en largar, ascendiendo hasta noveno, y por el contrario Oscar Piastri era el que más problemas tenía, cayendo a cola tras rozarse con Pierre Gasly.
Si bien al poco (aquí sí estuvieron raudos, como ha de ser), comunicaban cinco segundos de sanción a Fernando a cumplir en su pit stop por colocar mal su monoplaza en las marcas de salida. Esta penalización, o más bien su posterior cumplimiento, sería lo que a la postre desencadenaría la polémica de la que hablamos en las líneas iniciales.
El liderato del pelotón le dura poco al español, como era de esperar, ya que con el Red Bull pegado a su zaga y con las inmensas rectas de Yeda, en cuanto se habilitó el DRS Pérez lo adelantó fácilmente. Pero después de esto, lo cierto es que Fernando no se despegó de Checo.
Por detrás, Leclerc que está haciendo muy buen primer stint llega a la altura de Hamilton y lo rebasa colocándose séptimo. Y un par de giros después, Verstappen que ya igualmente viene fuerte, hace lo propio con Lewis. Realmente lo más vistoso está siendo la progresión de estos dos pilotos que arrancaban desde plazas algo retrasadas, de modo que cuando llegamos al inicio de las primeras detenciones, Charles ya rueda detrás de Sainz a cuatro segundos.
Cuando entramos de lleno en esa ventana de paradas, Max es ya el piloto más rápido en pista, pero rueda sexto a más de veinte segundos de la cabeza. Pero entonces, estando inmersos en ese baile de boxes, se produce el punto de inflexión de la cita saudí cuando tiene que salir el Coche de Seguridad tras el abandono de Stroll cuyo Aston Martin desfallece.
La situación va a resultar de enorme beneficio para unos (los que justo se disponían a parar) frente a otros (los acaban de hacerlo), como es el ejemplo de Verstappen que no había entrado aún y que saldrá muy favorecido frente a los dos Ferrari que recién acaban de salir de boxes.
El vuelco de situación es notable y cuando se relance la prueba en la vuelta 20, y con todos pegados ahora, el orden queda con Pérez al frente seguido de Alonso, Russell, Verstappen (ya cuarto), y luego Sainz quinto, Hamilton y Leclerc. De todos ellos Lewis es el único que va con Medias mientras que el resto confía en las Duras para ir hasta meta, y aparte, ahora ya sí se puede contar con Verstappen como una amenaza seria en lo referente a la consecución del triunfo.
Tras la reanudación se mantienen las plazas momentáneamente, si bien Hamilton se aprovecha de sus gomas al poco para adelantar a Sainz poniéndose quinto. Tampoco tardará Max en liquidar a Russell entrando en plazas de podio. Estamos en el ecuador, y con el holandés a menos de un segundo de Fernando todo pinta a que su remontada se ha consumado y que el asunto finalizará en otro doblete de Red Bull.
Y efectivamente, en el giro 25 Verstappen rebasa a Alonso sin complicaciones quedando ya segundo con sólo su compañero Pérez por delante, a cinco segundos. Vivimos muy buenas vueltas desde aquí, pero en verdad la carrera estaba ya finiquitada, pues nada ya apenas se movió significativamente.
Decimos que se vivieron giros interesantes porque en verdad Verstappen quiso ganar en Arabia, pero esta vez Sergio le respondió, en los relojes, que no. Que esta vez no, que sin órdenes de equipo mediante, el neerlandés iba a tener que ganárselo en pista, con tiempos y asumiendo riesgos si quería lograrlo. Y así, los dos Red Bull desplegaron su ritmo real, inalcanzable para el resto, con una preciosa secuencia de vueltas rápidas de Max que inmediatamente eran respondidas por Pérez en la misma línea, de modo que, en verdad, el bicampeón apenas conseguía enjugar en nada la distancia, hasta que finalmente tuvo que asumirlo y levantar el pie, conformándose con marcar la vuelta rápida de carrera para, al menos, conservar el liderato del mundial de pilotos.
Y estos fueron los resultados, tiempos y posiciones provisionales de este Gran Premio de Arabia Saudita 2023:
>>Nota de Edición: tras varias horas de investigación y ante el recurso presentado por Aston Martin a la sanción de Fernando Alonso, la FIA resolvió anular dicha penalización, por lo que se descuentan de nuevo esos 10 segundos a su tiempo, restituyendo así el tercer puesto final del español, que consigue su podio número cien.
