Max Verstappen sigue cosechando triunfos y adueñándose del circuito austríaco de la misma manera que lo va ejerciendo sobre el tablero del campeonato mundial de conductores. La propuesta de Red Bull se hace cada vez más consistente y Mercedes en esta carrera se ha visto desbordado hasta tal punto de no poder inquietar en ningún momento a la escuadra de Milton Keynes debido al ritmo que impone el piloto de los países bajos. Quinta victoria consecutiva de Red Bull de las seis que ostenta en su haber al haberse disputado nueve competencias. Las restantes victorias fueron para Mercedes. El duelo anticipado entra ambas escuderías está mas latente que nunca pero pocos pensarían que Hamilton se iba a encontrar 32 puntos por debajo del líder del campeonato a esta altura. Habría que remontarse al 2017 cuando, a bordo de una Ferrari, Sebastian Vettel le sacara una ventaja de 25 puntos luego de disputarse el Gran Premio de Monaco.
Preocupación en Mercedes porque si algo le faltó en este último Gran Premio fue solidez e inclusive sucedió algo impensado que fue darle la libertad a Bottas para poder rebasar a su compañero de equipo que no venía con el ritmo adecuado. Es de esperar las nuevas actualizaciones que prometió la escudería germana para el Gran Premio de Inglaterra (Silverstone) para que pueda resurgir y no perder distancia frente a su principal oponente. La gente de Christian Horner supo cubrir sus falencias en cuanto a ciertas prestaciones del monoplaza que se sucedían en el pasado y sumado a un impecable pilotaje de su piloto estrella hacen de la ecuación del éxito un resultado hasta el momento positivo. Max Verstappen no solo ha sumado un Hat Trick en esta competencia sino también el honor de abrirse paso entre los que han conseguido un «Grand Chelem» (Pole position , victoria, récord de vuelta en carrera y ser líder de punta a punta) en la historia de los Grandes Premios. Ahora suman 25 los pilotos que han conseguido éste importante logro. El neerlandés expresó luego de la carrera: «Yo mismo estoy un poco sorprendido de cómo ha ido hoy. No esperaba que fuera así. Un trabajo increíble por parte de todos para conseguir algo así».
Se viene Silverstone, circuito donde Mercedes es dueña de siete victorias sobre las ocho últimas ediciones disputadas. Habrá más trabajo del deseado para los de Toto Wolff, tanto en aerodinamia como en motor si no quiere que el campeonato termine en manos de la escudería austríaca. Como novedad también se vendrá la carrera tipo sprint, algo que se verá en tres Grandes Premios de esta temporada, donde se introducen las mismas para determinar la posición de largada para la carrera del Domingo. Habrá que considerar varios factores como desgaste de piezas, neumáticos y otras cuestiones que podrán surgir como consecuencia de este nuevo evento y las lógicas reacciones de pilotos y equipos. En principio Red Bull lleva el toro (su toro) por las astas, y Mercedes deberá no solo centrarse en el modelo 2022 como ha esgrimido Toto Wolff , sino que deberá dejar de lado las excusas (increíbles) y focalizarse en su inusual presente y su futuro inmediato. El temple del equipo se pone una vez mas a prueba y este año tiene un auténtico rival como hace tiempo nadie se le ha plantado.
