Como iniciativa de la FIA para que la Fórmula 1 sea más sostenible económicamente, el año pasado se prohibió el desarrollo de combustible para la temporada 2020, no obstante, para este campeonato los equipos están autorizados a poseer una nueva especificación de combustible, que la deberán usar en todas las carreras, sin lugar a tener variaciones en ella.
En consecuencia, la petrolera estadounidense ExxonMobil, proveedora de gasolina para Red Bull, ha aprovechado y se ha enfocado en mejorar su fórmula para que el motor Honda RA621H optimice su desempeño.
«Durante el año pasado, los especialistas de ExxonMobil han trabajado en estrecha colaboración con nuestros ingenieros y los de Honda para proporcionarnos un combustible que funcione en armonía con nuestra nueva unidad de potencia y el RB16B. Cada elemento es un arma enormemente valiosa en el arsenal del equipo a medida que avanzamos en la lucha por el Campeonato Mundial de Fórmula 1 de este año», aseguró Christian Horner.
Por otro lado, el jefe técnico del equipo, Pierre Waché, explicó la importancia de este último desarrollo:
«El combustible es un componente enormemente importante y la fórmula correcta no sólo puede conducir a una mayor potencia bruta y una mayor eficiencia, sino que también puede dar al fabricante varias pistas para seguir desarrollando ciertas cosas que pueden ayudar a optimizar el rendimiento. La estrecha relación de trabajo entre ExxonMobil, Honda y el equipo ciertamente lo han asegurado con el RB16B, y no podemos esperar a ver los resultados de eso reflejados la próxima temporada».
Así, la escudería austríaca está afilando sus distintas armas (dos pilotos competitivos, como lo son Verstappen y Pérez, un auto que mostró mayor fiabilidad que el Mercedes en Baréin y una gasolina mejorada) para ir por una victoria en el circuito de Sakhir el próximo fin de semana.
