Con los salarios de los pilotos destapados por el tabloide británico The Sun, Helmut Marko declaró a la RTL que «Hamilton es simplemente demasiado caro para la Fórmula 1. Por ello necesitamos que el sueldo de los pilotos se incluya en el techo presupuestario. Ya que en 2021 veremos la introducción del techo presupuestario por primera vez en la historia de la F1, en la reunión se han planteado varias cuestiones sobre el control de gastos y cómo podemos alcanzar este objetivo en los próximos años. Como parte de eso, se creará un grupo de trabajo que incluirá a los pilotos para discutir el punto de los contratos de los pilotos y de los gestores de los equipos».

Hamilton junto a Bottas y Albon en el podio del GP de la Toscana (el anglo tailandés era el peor pagado de la parrilla el año pasado).

El piloto inglés cobra nada menos que 46 millones de euros incluyendo un bonus de casi seis merced a dos patrocinadores personales nuevos en casco y mono de los cuales Mercedes no percibe una libra. Según la prensa británica, Max Verstappen es el segundo en discordia con 21 millones de euros, aunque el holandés cumple contrato a finales de la próxima temporada y podría marcharse gratis si Red Bull no consigue ninguna victoria gracias a una cláusula de rendimiento en su contrato. A continuación, Charles Leclerc y Daniel Ricciardo superan levemente los 11 millones y medio de euros, con McLaren rascándose el bolsillo dado que ni Carlos Sainz ni Lando Norris llegaban entre ambos a igualar esa cifra el año pasado (3 millones para el madrileño en 2020 frente a menos de un cuarto de millón para el británico, que aún conserva contrato de debutante).

Carlos Sainz ha mejorado considerablemente sus emolumentos en Ferrari, siendo el piloto español mejor pagado con algo más de 8 millones de euros por temporada, moviéndose en el mismo rango que Sebastian Vettel en Aston Martin. Fernando Alonso se embolsará 7 millones y medio de euros por temporada en su retorno a la Fórmula 1, aunque Alpine (Renault) le compensará con publicidad de Kimoa y bonus extra en cinco millones adicionales. Valtteri Bottas no llega a los 7 millones de euros por temporada, mientras Sergio Pérez sube notoriamente su caché en Red Bull cobrando 5 millones de euros anuales.

Carlos Sainz ha pasado de cobrar 3 millones de euros en McLaren a embolsarse más de 8 en Ferrari.

Kimi Raikkonen conserva una ficha superior a los 4 millones de euros en Alfa Romeo, mientras Esteban Ocon roza el millón y medio de euros en Alpine. Lance Stroll cobra un millón de euros del consorcio de su padre Lawrence, mientras Pierre Gasly es el mejor pagado de los ‘pobres’ con cuatrocientos mil euros de caché. Tsunoda, Norris, Giovinazzi, Russell y Latifi apenas superan los doscientos mil euros de ficha aunque en el caso de Alpha Tauri no les pagan ni siquiera los gastos de desplazamiento, como ya viene siendo norma en la escuadra de Faenza.

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