Cuando parecía que el calendario de la Fórmula 1 iba a cerrarse definitivamente, las restricciones de viaje entre Portugal y Reino Unido a causa de la pandemia de CoVid-19 podrían dar al traste con la carrera en el Autódromo del Algarve, que sería sustituido por un segundo evento en Baréin utilizando el circuito externo como ya sucedió a finales de la temporada pasada. El Gran Premio luso iba a tener lugar el 2 de mayo, y el reajuste debido a su cancelación daría lugar a dos fines de semana consecutivos en Sakhir el 28 de marzo y 4 de abril.
A causa de este cambio de planes, el Gran Premio de Emilia-Romana (absurdamente denominado ‘Made in Italy’ por alguna mente brillante del gobierno transalpino) tendría lugar en Imola el 25 de abril, una semana más tarde de lo previsto inicialmente. Ahora mismo los pasajeros que entran en Reino Unido provenientes de Portugal deben pasar una cuarentena de diez días en hoteles dispuesto por el gobierno de Boris Johnson alrededor de los principales aeropuertos del país. Todo ello debido a la presencia de la peligrosa cepa sudafricana en el país luso, que ahora mismo se encuentra en estado de confinamiento domiciliario y cuya frontera con nuestro país permanece cerrada.
La carrera de Montmeló del 9 de mayo permanece inalterada siendo la segunda prueba de la Fórmula 1 en continente europeo. Esta semana pasada, el trazado catalán estrenó la remozada curva 10, que recupera el trazado original del circuito en la entrada de la zona del Estadio.
