Máxima igualdad en el Red Bull Ring, donde Ferrari y Mercedes se van a disputar la pole position dadas las ínfimas diferencias entre ambas escuadras sobre el carrusel austríaco. Red Bull se descuelga del tren de cabeza como suele ser habitual en su circuito de ‘casa’. En los últimos libres , Sebastian Vettel ha sido el más rápido relegando a los Mercedes de Lewis Hamilton y Valtteri Bottas a la segunda y tercera posición respectivamente. Hamilton trató de obtener una vuelta más homogénea pero no fue suficiente para batir al Ferrari. Kimi Raikkonen volvió a ser el cuarto en liza, siendo cuatro décimas de segundo más lento que su compañero.
Como decíamos, los Red Bull están sufriendo más de lo previsto a una vuelta y no parece que sean competencia a la hora de disputar la pole position. En esta ocasión fue Max Verstappen quien mantuvo a raya a su compañero al ser una décima de segundo más rápido. Los Haas parecen imbatibles como cuarta fuerza en discordia y Carlos Sainz no pudo dar caza a ninguno de los monoplazas norteamericanos aunque llevó el Renault a la novena plaza mostrando más ritmo y consistencia que su compañero de equipo. Tras el baño que propinó a Hülkenberg en Paul Ricard, parece que el madrileño vuelve a tener la baza ganadora en el garaje de la escudería del rombo. No obstante el monoplaza galo sigue mostrando sus carencias rodando un segundo más lento que el mejor crono.
Charles Leclerc cerró el top diez con problemas de transmisión. No fue el único que tuvo que detener su monoplaza en pista ya que Max Verstappen tuvo que abandonar la sesión por problemas eléctricos en su propulsor pasada la curva cuatro. Está por ver si en Red Bull son capaces de resolver el problema antes de la sesión de calificación, mientras en Sauber tendrán que sustituir la caja de cambios de Leclerc arrastrando una sanción de cinco puestos. Los McLaren siguen languideciendo en Austria como prueba Fernando Alonso con su decimocuarto mejor crono, a 1″378 de Sebastian Vettel. Su compañero Stoffel Vandoorne resultó antepenúltimo por delante de unos Williams que dan verdadera lástima.
