Previo del GP de Brasil 2017: Aires de revancha en Interlagos

Con los títulos de pilotos y constructores ya decididos, el Gran Premio de Brasil se presenta como una oportunidad inmejorable para que tanto Ferrari como Red Bull busquen la victoria en el trazado paulista refrendando su buen momento de forma en un circuito que puede deparar una bonita lucha a tres bandas al resaltar los pocos defectos del monoplaza que ha logrado la doble corona esta campaña.

Interlagos es un circuito revirado, estrecho e impredecible como ya demostró Lewis Hamilton al ganar el campeonato en la última curva de la última vuelta en 2008 con aquel infame adelantamiento al Toyota de Timo Glock que privó a Felipe Massa del que habría sido su único título mundial. El piloto paulista aprovechará para despedirse de su afición tras anunciar su retirada de la Fórmula 1-esta vez de verdad- a final de temporada.

Neumáticos y estrategia

Para la penúltima prueba de la temporada 2017 de Fórmula 1, Pirelli ha designado los neumáticos P Zero blanco medio, P Zero amarillo blando y P Zero rojo superblando. El compuesto medio será utilizado por última vez este año aquí en Brasil.

La vuelta de Interlagos es una de las más cortas e intensas de todo el año, tanto en lo que respecta al esfuerzo exigido como al ambiente. Cuenta con una serie de curvas rápidas, desniveles constantes y una climatología que puede pasar del calor intenso a la lluvia torrencial. Una vez más, la selección de neumáticos en Brasil es más blanda que en años anteriores, con el medio que será el compuesto más duro disponible.

El circuito fue reasfaltado hace poco, lo cual eliminó algunos de los famosos baches de Interlagos. Es la segunda vuelta más corta de la temporada (después de Mónaco). Por tanto, los coches están en curva casi continuamente y suelen tener que salirse de la trazada para adelantar. Se corre en sentido contrario al de las agujas del reloj. El neumático trasero derecho es el más solicitado. La rápida sucesión de curvas y las cargas elevadas exigen mucho a los neumáticos. Además, con frecuencia los neumáticos están sometidos a notables cargas laterales y longitudinales combinadas. Por extraño que parezca, Lewis Hamilton ganó el año pasado bajo la lluvia sin efectuar ningún pit stop en carrera, puesto que aprovechó una bandera roja para montar un juego nuevo de neumáticos de lluvia. Sin embargo, en 2015 los tres primeros pararon tres veces.

La posibilidad de lluvia para la calificación y carrera aumenta la impredictibilidad como vimos cuando Nico Hülkenberg se llevó la pole position por sorpresa a bordo del Williams en 2010.

Apostar en la Quiniela F1. La semana próxima anunciaremos los regalos para los tres primeros que se otorgarán tras el Gran Premio de Abu Dabi.

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