Lewis Hamilton ha vuelto a encabezar la tabla de tiempos en la segunda sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de España en el circuito de Montmeló tras ser casi una décima de segundo más rápido que su compañero Valtteri Bottas.
El perseguidor más cercano de las flechas de plata ha sido Ferrari, con Kimi Raikkonen a tres décimas y Sebastian Vettel a cuatro. Sin embargo, la diferencia no ha sido tan abultada como en la sesión matinal, lo cual concede algo de esperanza de emoción para la lucha por la pole de mañana.
La tanda larga de Raikkonen fue interrumpida brevemente por un supuesto problema con el motor pero el finlandés pudo completar la sesión sin mayores problemas aunque tuvo un altercado con Sergio Pérez en la curva 5 donde ambos casi se tocan tras intentar adelantar al Force India del mexicano por fuera.
Sebastian Vettel también se llevó un susto al salirse en la curva 4. Además de Ferrari, también Red Bull estuvo más cerca de sus rivales en estos libres con el ganador del año pasado Max Verstappen superando a Daniel Ricciardo en décima y media. El holandés sufrió una salida de pista en la curva 9 a causa del viento, que se ha convertido en un factor importante en el Circuit de Catalunya a la hora de buscar el setup correcto de cara a la calificación de mañana.
Renault se acercó bastante a los Red Bull con Nico Hülkenberg siendo el último piloto en clasificarse a menos de un segundo de Lewis Hamilton mientras Jolyon Palmer era octavo tras haber sido dustituido por Sergey Sirotkin en la sesión matinal.
Tras el Williams de Felipe Massa, el madrileño Carlos Sainz volvió a cerrar el top diez pese a protagonizar la única bandera roja del día al perder parte de la carrocería en los arcenes de la curva 9 mientras Fernando Alonso cerró la tabla tras haber perdido los primeros libres con una fuga de aceite en el motor Honda de su McLaren MCL32.
El asturiano tuvo que esperar media hora antes de subirse a su monoplaza y tardó más aún en poder completar alguna tanda quejándose por radio de la falta de potencia del nuevo propulsor montado tirando de ironía pura y dura: «El motor se siente bien, mucho más lento que antes. Increíble»
