Nacido en la ciudad española de Benicasim (Castellón) un 22 de Marzo de 1991, este joven piloto tiene ya una dilatada experiencia en diversas disciplinas automovilísticas. Sus inicios, como es habitual, se sitúan en el mundo del Karting cuando cuenta 8 años de edad, comenzando una carrera en la que consigue notables méritos, tanto a nivel nacional, como según evoluciona, a nivel internacional.
Quedando demostrado que el incipiente talento tiene buenas manos, es promovido en 2006 para disputar las Winter Series Italianas F-Renault 2.0, con el equipo It Loox Racing, que finaliza en tercera posición tras subir al podio en 3 de las 4 carreras. Todo ello, le ayuda a fichar por la escuadra suiza Jenzer Motorsport en 2007, para disputar la Eurocup F-Renault 2.0 en lo que sería una temporada de aclimatación, y a la vez la Serie Italiana de la misma categoría, donde ya sí destaca, sobre todo con un brillantísimo triunfo en Spa, finalizando 4º en el campeonato.
El año siguiente, 2008, Roberto cambia de equipo integrando las filas del español Epsilon Euskadi, con el que disputará el F-Renault 2.o WEC (un certamen multinacional que engloba Portugal, Francia y España) que finaliza 2º con 3 victorias entre un total de 14 podios de 16 carreras. Además vuelve a competir en la Eurocup de igual categoría como el año anterior, finalizando 4º en la general, acumulando hasta 7 podios, de los cuales 2 serán triunfos.
Aparte de esto, en esos tres años, Merhi había competido paralelamente también en el Campeonato de España de F3 con varios equipos cosechando varias victorias, por lo que en 2009 es firmado por el equipo Manor Motorsport para debutar en la F3 Euroseries, donde acabará 7º con 4 podios. A la vez, Mercedes no pierde la oportunidad de captarle para su Programa de Jóvenes Pilotos.
La siguiente temporada, 2010, el español repetirá en la F3 Euroseries, esta vez con Mücke Motorsport, donde luchará a brazo partido con Valtteri Bottas, finalizando 5º el certamen, y consiguiendo una victoria y otros tres podios. Al mismo tiempo, debuta en la GP3 Series, aunque con el campeonato ya empezado, a las filas de Atech Grand Prix y no lo hace nada mal pese a las circunstancias, acabando 6º tras subir al podio en 3 ocasiones.
2011 es un año clave para Merhi. A los mandos de un Prema Powerteam conquista esta vez sí el F3 Euroseries tras una singladura casi perfecta, en la barrió a todos obteniendo nada menos que 11 victorias y otros 9 podios sin dar lugar a oposición. Además, en todos estos años también disputó los prestigiosos eventos de Macao, Masters de Zolder y Masters de Zandvoort, en los que si bien no ganó, sí brilló fehacientemente.
Tras esa excepcional campaña, Roberto toma una arriesgada decisión, apuntándose para correr la temporada 2012 del disputado y complicadísimo DTM, tal vez intentando seguir los pasos de Paul Di Resta, que le catapulten hacia la Fórmula1. Ingresa en el equipo Persson Motorsport, y al año siguiente seguirá intentándolo con Mücke Motorsport. Pero puede que esto resultara un punto de inflexión no tan positivo, pues su periplo fue arduo y la mayoría de las veces poco afortunado, acumulando un sinfín de problemas durante estos dos años. Sólo un 2º puesto en la última carrera de 2013 maquilla efímeramente su andadura en el DTM.
Así las cosas, en 2014 regresa a los monoplazas, en la World Series by Renault 3.5, con el equipo Zeta Corse, donde volverá a encenderse su luz con una meritoria temporada en la que luchó por el Campeonato hasta la prueba final de Jerez contra su compatriota Carlos Sainz, y donde un desafortunado abandono le apartó de las aspiraciones relegándole a la 3ª posición final de la general, pero sumando 3 victorias dos Poles y otros 3 segundos puestos. Además, su buen hacer le promueve hasta conseguir una plaza de probador en F1, con el equipo Caterham, debutando en la categoría reina en los Libres del Gran Premio de Italia, y luego también en Japón y Rusia.
Merhi, no obstante, probablemente tiene la sensación de que su tiempo se está agotando, máxime viendo cómo pilotos contra los que ha competido, y también batido a veces, como Bottas, Ricciardo, Magnussen, Gutiérrez, Bianchi, Sainz… y que, cuando menos, él considera a un nivel similar, han logrado asientos en F1 mientras él no lo consigue… Cuando finalmente, en 2015, la renacida escudería Manor, de las cenizas de Marussia, le llama apenas una semana antes de empezar el Mundial (sin coche montado ni presentado aún, ni ningún test de pretemporada hecho) para que comience el año con ellos, con Will Stevens como compañero.
El puesto tiene todas las dudas del mundo en cuanto a futuro, viabilidad de proyecto y demás, en un equipo que se presupone hasta el cuello económicamente hablando. Aparte de tocarle bailar con la más fea, cenicienta de la categoría en un monoplaza terriblemente inferior y desactualizado. Pero ante nada mejor, ha de subirse a ese tren, y esperar que ganándoselo con su talento puro, como en el caso del malogrado Bianchi, otros ojos más poderosos se fijen en su figura. Esperamos que así sea pues lo merece.
