El glamour, los yates, los bikinis y los monoplazas de Fórmula 1 vuelven a darse cita un año más en el urbano y elitista circuito de Monaco.
Este año, todo esto se va a tener que esconder por la lluvia y las nubes que comienzan a atemorizar a todos esos famosos que no han dudado en desplazarse al principado más chic de todo el planeta.
Por las calles de Monaco desfilarán en una hora los monoplazas con un único propósito, el de pasar el túnel en la primera vuelta. En un circuito tan complicado y con las barreras pegadas a la pista, las primeras curvas se convierten en poco menos que un riesgo y hasta que no pasan Loews, la curva más lenta de todo el campeonato, el pelotón rueda con extrema precaución. Si a eso le sumamos la amenazante lluvia, el resultado puede ser un tremendo caos.
McLaren y sus diamantes
Las balas de plata llevaban marcando desde el jueves un ritmo regular y que hacía que se pensara en ellos como en los favoritos para esta carrera con Ferrari rodando muy rápido pero con mayores altibajos. Los pilotos de la marca anglogermana contarán al menos con la suerte de lucir un casco decorado con diamantes, algo que sólo puede pasar en un sitio, en Monaco. Al parecer, unos fallos en la configuración del coche les privaron de estar delante de los Ferrari.
Alonso, los bikinis y la séptima posición
Desde el jueves, el español está abonado a esta posición y lo de los bikinis es sólo una excusa para poner esta foto que ha rondado muchas webs en estos días. El español sigue su línea de mejora iniciada en Barcelona y que está convirtiéndolo en la sombra (a distancia) de BMW, que intenta seguir a McLaren y Ferrari pero que no lo tendrá fácil, con Heidfeld lejos de la cabeza.
A ellos se les ha sumado un acompañante a tener en cuenta, el Williams de Rosberg, que tratará junto a Webber y Trulli de ponerle los puntos difíciles tanto a Kubica como a Alonso.
Gane quien gane en la pista, el protagonista siempre será Monaco, el glamour y su circuito.
