Y llega Shanghai, cuando todavía no nos hemos olvidado del desastre de Japón. Rodeado por la polémica, esta vez puesta por la FIA, que decidió no sancionar a Hamilton después de descubrir nuevos videos que demostraban las irregularidades en la conducción del inglés tras el safety car en el pasado Gran Premio.
Una medida incomprendida por el grueso de los pilotos, que demandó un castigo para el que está llamado a ser el primer piloto de la historia de la Fórmula 1 en ganar el Campeonato del Mundo en su primera participación.
Por si no había suficiente polémica, unas declaraciones de Fernando Alonso en las sesiones clasificatorias de hoy han puesto la guinda al pastel: «Tengo confianza cero en este equipo». Y es que Hamilton ha hecho «una vuelta perfecta y sin errores», por lo que no entiende la razón por la que ha rodado cinco décimas más lento que su compañero con el mismo monoplaza. La única explicación que encuentra es la de la carga de gasolina: «La tercera sesión ha sido muy rara, porque estoy más atrás de lo esperado. Espero que sea por la carga de gasolina de cara a la estrategia de respotaje. Creía que podía haber ido más arriba», apuntó en declaraciones a Telecinco.
La carrera se disputará a 56 vueltas al rededor de la pista china de 5,451 kilómetros, lo que da un recorrido total de 305,066 kilómetros al término de la prueba. Empezará a las 14:00 hora local, en España a las 08:00, con los ojos puestos en el cielo ante las amenazas de que el tifón Krosa pueda rozar la zona en la que se encuentra el circuito.
Ya sólo queda esperar unas horas para resolver la pregunta que recorre nuestras cabezas, ¿será capaz Alonso de arrebatarle el Mundial a Hamilton o estamos ante lo que sería la fiesta de coronación del británico?. Lo sabremos con la bandera a cuadros.