El británico Lewis Hamilton, piloto de Mercedes y segundo de la actual clasificación general, volverá a salir en Pole Position por segunda vez consecutiva, al haber vuelto a resultar el corredor más veloz los sábados en las dos clasificaciones que llevamos en la temporada.

En segunda posición, y justo a su lado, comenzará la carrera mañana el actual líder del Mundial, su compañero de escuadra plateada Nico Rosberg, que estuvo muy cerca (a menos de una décima) de arrebatarle esa preciada plaza.

Y tras los dos bólidos de la estrella, siguiendo el orden natural previsto, se situaron los monoplazas rojos de Maranello, siendo el alemán Sebastian Vettel quien largará tercero, con su compañero finlandés Kimi Räikkönen escoltándole.

En Baréin, como saben, esta vez sólo tenemos una presencia española en pista por el plazo de recuperación que han obligado a mantener a Fernando Alonso tras las secuelas físicas de su violento accidente hace catorce días en Melbourne. Por lo tanto, caerá en los hombros de Carlos Sainz toda la representación patria (para los aficionados españoles), y lo hará desde el puesto decimoprimero, al acecho con su Toro Rosso, y con buenas posibilidades de cosechar algún punto.

Hamilton consigue la Pole del GP Baréin 2016

Hoy me podrán decir que tuvo la sesión clasificatoria algo más de emoción. Es cierto. Tan cierto como que en realidad esos tintes de emoción fueron en gran parte humo. Lo salvó un pequeño error de Hamilton en la primera intentona de la Q3. De no cometer ese desliz de una par de décimas… otra vez agua.

Lo cierto es que es complicado intentar hacer una crónica deportiva, en un deporte como este, cuando apenas hay trascendencia deportiva en lo trasciende en la pista. Cuando lo que vemos, en su mayor parte, es a los pilotos y equipos básicamente condenados a intentar hacer un tiempo decente a las primeras de cambio, y resignarse a ver en qué queda la cosa.

Entiendo que cuando se plantea y se decide por este nuevo formato, ha de ser persiguiendo las mejores intenciones de cara al espectáculo y la competión en sí. También acepto, lógicamente, que haya a quien le resulte atractivo. Pero no puedo compartirlo. No obstante, como en esto entramos en cuestiones de gusto, yo doy pues, solo mi personalísima opinión.

P. Wehrlein. Calificación GP de Baréin 2016

Y por tanto, he de decir que alguien ha de concluir que la tentativa simplemente no funciona. No consigue la meta deseada, sin más. Y por ello pienso que dos carreras son más que suficientes para aceptarlo y cambiarlo.

El otro día, tras el esperpento que vimos en Australia, no me corté en catalogar el sistema con calificativos como nefasto, o infame (dicho siempre desde el respeto, y en clave de crítica constructiva). Hoy, en el mismo tono, y a pesar de que “aparentemente” dio sensación de más emoción… añadiré el adjetivo de insultante (repito, desde el respeto).

Y lo explico. En un deporte donde la esencia es la lucha por la velocidad, contra el reloj, en la última instancia. Donde el espectador, y el propio profesional, buscan eso en su anhelo final, este sistema mata el espíritu de esa competencia. Se mata literalmente el alma y el ser de la F1.

Magnussen. Calificación GP de Baréin 2016

Ustedes saben lo que cuesta la Fórmula 1. Tanto como espectadores en casa, como si van a los circuitos. Es una afición cara, a poco que seas un seguidor con cierta pasión. Tanto si han de abonarse a los canales con licencia de emisión, como si se desplazan a los circuitos, la temporada, en el mejor de los casos, les costará, tirando a lo mínimo, varios (bastantes) centenares de euros. Quiero decir, que si son aficionados a ver otros programas, entretenimientos o películas por televisión (por seguir con ejemplo), en comparación les saldrá relativamente gratis.

Pues bien. Por ello digo insultante. Pagar un buen dinero (más aún una entrada) por ver una sesión de estás, es para pedir reclamaciones. Hoy lo más infumable fue la Q2, con todos los coches ya parados en sus boxes, y sin ninguna intención de salir (salvo Nico Hülkenberg) a falta nada menos que de seis minutos… cielo santo… Un espectador in situ debería estar en todo sus derecho de reclamar su dinero.

Muy parecido en la Q3, que se disimuló por el ya mencionado desliz de Hamilton, que obligó a esforzarse a los Mercedes en un segundo intento. Sin ello, habríamos vivido otro simulacro al estilo de Albert Park, con los dos saliendo por si acaso, y en cuanto vean en un sector que no hay chicha…a casita. Aun con todo y eso, hoy, a falta de tres minutos, también todo estaba vendido.

Sainz. Calificación GP de Baréin 2016

Por eso digo que el reglamento nos mata ese espíritu de competencia última. Pero ya no sólo a nosotros, sino que también a los propios pilotos y equipos, más pendientes de esos lapsos y márgenes… de esas ventanas de oportunidad, que de rendir a tope en el momento óptimo y echando el resto en ese giro. Y eso también es “insultante” para los protagonistas.

Porque fíjense en una cosa: observen la tabla de tiempos. Y noten por ejemplo las diferencias entre los dos Williams (6º y 7º) sólo 2 milésimas!!!… o las distancias entre 9º, 10º y 11º, en este caso Romain Grosjean, Max Verstappen y Sainz, separados los tres por apenas 50 centésimas… ¿acaso no estarían todos ellos en condiciones y posibilidad de atacar esos cronos y mejorar sustancialmente  posiciones?

Seguro que sí, en clave de libre competencia. Pero no ahora, donde simplemente no optan por mero límite de tiempo reglamentario a esa posibilidad. El sistema decapita esa posibilidad de raíz (si no conduces un Mercedes, o Ferrari como poco)… y eso es triste. A mi personalmente eso incluso llega a ofenderme, ese “rapto de posibilidad”. Y no creo que a los pilotos les resulte muy diferente.

Grosjean. Calificación GP de Baréin 2016

Por lo demás, poca trascendencia puramente deportiva… los corredores cayendo poco a poco casi por “incomparecencia”. A destacar los notorios problemas de Renault, nada finos, atrás con los Sauber, así como de otros pilotos más punteros como Sergio Pérez o Daniil Kvyat. Por el contrario, muy buen resultado hoy de los Manor (Río Haryanto 20º y especialmente Pascal Wehrlein 16º), así como de nuevo Grosjean y su Haas, increíblemente 9º.

Por arriba, lo predecible, aunque a tener muy en cuenta para la carrera a los Ferrari, ya que han demostrado un impresionante ritmo en tandas largas, superior a Mercedes, y que mañana podrían atentar seriamente el trono de la estrella plateada si las sensaciones de hoy se confirman.

Y estos fueron los tiempos y posiciones finales que conforman la Parrilla de este Gran Premio de Baréin 2016:

Calificación GP de Baréin 2016

 

1 COMENTARIO

  1. Buenos días David.
    En la quiniela no aparece Stoffel Vandoorne, en su lugar aposté con el nombre de Fernando Alonso.
    ¿Es correcto verdad?
    Saludos

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.